1. Contexto
La calidad integral de un vehículo es, en sentido figurado, igual a la suma de sus partes; por ende, es imperativo para los fabricantes mantener rigurosos estándares de excelencia para cada componente. Los fabricantes también deben tomar en cuenta requisitos rigurosos, como la reducción de emisiones, el rendimiento del combustible, la durabilidad a largo plazo y los estándares normativos. La creciente sofisticación de las piezas automotrices y sus componentes también exigen que los fabricantes concedan mayor importancia a las características de los materiales, la tolerancia de ajuste, y la limpieza técnica, cuyos efectos juegan un papel dominante en la durabilidad a largo plazo, rendimiento y vida útil prolongada del producto final.
Por otro lado, partículas contaminantes pueden afectar directamente la fiabilidad de una pieza, en especial cuando esta última es montada usando componentes de otros proveedores. A medida que los sistemas y componentes se contraen, incluso las partículas más pequeñas pueden causar fallas catastróficas, por lo que es esencial evaluar la limpieza técnica y la integridad de los componentes y líquidos.
2. Aplicación
El refrigerante que fluye por el tubo del radiador ayuda a mantener el motor del automóvil frío. Si los contaminantes son dejados dentro del tubo durante la fabricación del radiador, puede reducirse la eficacia de la refrigeración e incluso provocar daños al motor. El interior del tubo es limpiado exhaustivamente durante el proceso de fabricación y el nivel de limpieza se inspecciona de forma rigurosa.
Para inspeccionar la limpieza de un tubo de radiador, se hace circular el líquido de limpieza dentro del tubo y después se pasa por un filtro de membrana. Después de secar completamente el filtro de membrana, las partículas atrapadas en la superficie del filtro son contadas y medidas para evaluar si el grado de limpieza es suficiente (Figura 1).
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Figura 1. Proceso de inspección de limpieza de un tubo de radiador.
3. Solución Olympus
Desarrollado para satisfacer los requisitos de limpieza de directivas nacionales e internacionales como ISO 16232-10 (A) (N) (V), VDA 19.1 (A) (N) (V), ISO 4406, ISO 4407, ISO 12345, NAS 1638, NF E48-651, NF E48-655 y SAE AS4059, el OLYMPUS CIX100 es un sistema llave en mano específico para tareas de recuento, análisis y clasificación de contaminantes y partículas extrañas micrónicas de hasta 2,5 µm. Esta solución de sistema todo en uno permite completar escaneos con el doble de rapidez a diferencia de otros sistemas de inspección, ya que las partículas metálicas y las no metálicas pueden ser detectadas de forma simultánea. Las partículas contadas y clasificadas son visualizadas en tiempo real, mientras que las potentes herramientas facilitan la revisión de los datos adquiridos. El software intuitivo dedicado a este sistema guía a los usuarios en cada paso del proceso de inspección, lo que permite que operadores principiantes adquieran datos de limpieza con rapidez y facilidad.
La función de gráfico de control estadístico representa el nivel de la conformidad de clase de la partícula para mejorar la fiabilidad, mientras que las imágenes en miniatura de cada contaminante detectado por el sistema se asocian con mediciones dimensionales para revisar fácilmente los datos. Los usuarios también pueden recuperar la información para un contaminante específico usando las plantillas estándar de Microsoft Word (Figura 4). La función de almacenamiento de datos del sistema proporciona acceso a los informes y las decisiones para revisión y almacenamiento a largo plazo si es necesario, además de guardar automáticamente la membrana escaneada para las tareas de reprocesado o recálculo.
Figura 2. Proceso de discriminación de imágenes entre los tipos de contaminantes adquiridos con el sistema de inspección de limpieza técnica | Figura 3. Informe de análisis de limpieza |